sumergido en mi paralelepípedo-biblioteca
(mi habitación, para qué complicarse)
me visita la musa Asma
ella es una especie de parca
quizás una de las hermanas
quizás una de las parcas no reconocidas
nadie sabe
ella quiere jugar con los hilos de mi vida
lo cierto es que
y por experiencia propia lo digo
cuando me visita tal musa no avisa
pero a penas ella llega
y de pronto el aire me es esquivo
y mi soledad es tres veces tres nada
y ella juega conmigo al cruzar el límite
el filo del más allá
o el más acá
quién sabe
goza viéndome desesperado
y quiere llevarte a su reino sin oxigeno
la prednisona
un fármaco
que adquiere una figura de héroe inútil
poco o nada puede hacer
y me siento un pez
desesperado
fuera del agua
o un gato dentro del agua
bueno
algo así
a veces yo llamo a la musa sin querer
ella busca mi tristeza
y también mi soledad
mejor es calmarse
y esperar que la musa se vaya
quizás sólo viene
a jugar
con el kamikase desertor
mejor es buscar a la musa del sueño
y olvidar la tristeza
y acordarse del aire
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