(90 años: la palabra jubilado no está en su diccionario)
¿La Hipótesis de Riemann será un TEOREMA? Una DEMOSTRACIÓN MATEMÁTICA(con todo el rigor que eso implica) podría dar el más hermoso regalo a la Historia de la Matemática y un gran aporte para el avance de la ciencia. Y, además, podría hacer del siglo XXI el Siglo de las Matemáticas.
A finales del siglo XX Andrew Wiles escribió la última página( o acaso el comienzo de una nueva historia) con la demostración del último teorema de Fermat, un problema donde eminentes matemáticos se han visto involucrados( o infectados). Sin duda toda una historia de amor matemático que ha generado una dinámica matemática sin precedentes. Pero las aventuras matemáticas continúan. A principios del siglo XXI la Conjetura de Poincaré se convirtió en el Teorema de Poincaré. El matemático ruso, Grigori Perelman, dió la demostración(vacuna) definitiva a la epidemia de poincaritis que sufría la comunidad matemática internacional. Varios problemas matemáticos importantes que estaban sin solución también se han resuelto en este siglo. Por ejemplo, en la teoría de números, la Conjetura débil de Goldbach ya es un teorema. La demostración fue dada por el matemático peruano Harald Helfgoff. Este año, 2018, la Conjetura de Lindelöf ya puede ser llamado el Teorema de Lindelöf. La prueba lo hizo el matemático griego Athanassios Fokas.
(Hipster matemático: adelantado a su época y a la moda)
Este próximo lunes(24 de setiembre) podría ser una de las más bellas singularidades matemáticas en el espacio-tiempo de la Historia de la Matemática: LA DEMOSTRACIÓN DE LA HIPÓTESIS DE RIEMANN. Esta noticia no pasa de ningún modo desapercibida pues él que propone la demostración es, ni nada más ni nada menos, que el matemático MICHAEL ATIYAH(Medalla Fields 1966 y Premio Abel 2004).
(Probablemente el tuit más hermoso de la historia de la matemáticas)
La comunidad matemática está excitada. Sí. Muy excitada. Pronto sabremos(algunos) si la conjetura será un Teorema o no. Si la solución es positiva, entonces pocos, muy pocos, entenderán después el asunto de la demostración en sí. Pero tal acontecimiento hará del siglo XXI EL SIGLO DE LOS MATEMÁTICOS. Bueno; en caso contrario(si la prueba no es correcta), Riemann continuará con su barba a lo hipster y todo el enigma seguirá rebanando los sesos a los matemáticos alrededor del planeta(y quizás de la galaxia). God bless Michael Atiyah.
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