(Un verdadero gato atrapa ratones)
PPK(Ich bin kaput) juega al gato y al ratón con toledo. Ya le puse precio a su cabeza como se hacia en el lejano oeste.
Todo un especta-culo para los cholitos que lo creen todo mientras les pisan el poncho y se cagan, también, en su poncho.
El gato no va a comer jamás al ratón verde, es un gato vegetariano, lobista y sabe que sólo es un juego. Algo así como Tom & Jerry para la TV. Además ya se escribió el libreto-acuerdo.
El ratón es sano y sagrado(huevadas de karp).
(No me hagas hablar because I know what you did last time!!!)
El ratón verde, convenientemente, se volverá un rabino. Una especie de hijo putativo de dios. Algo así como el bebe dinosaurio rex morado que se tiene que hacer miss simpatía para caerle bien a la comunidad judía(y sus billetes): chupamedia morado a la vista.
La otra ratita roja(y después blanca) con su mujer borrachita de poder(lo dijo el patriarca, eh) y la gran luchadora afrancesada(chic) contra los corruptos(bla bla bla), ya se olvidó de su nacionalismo y todas esas huevadas. Eran simples ladrones.
La rata gorda vino al país de las maravillas a bailar marinera y se fue del país. Nadie lo tocará: hay muchas ratas en los pasillos del poder judicial y los pocos gatos se cagan de miedo. Lo último no es novedad.
Mientras sigue el baile, la otra rata, desempleada y con sobrepeso, seguirá creyendo que encontrar droga en los almacenes de su hermanito es una cortina de humo. Qué pendeja la gordita. Acaso cree que en el país sólo habitan imbéciles.
No sé.
Quizás en un futuro cercano, otros candidatos se vistan de cholitos, bailen y convenzan a los cholitos otra vez. Easy.
Siempre les hacen así de cojudos con cuentos tan monses. Ya ustedes si les hacen de cojudos y quieren seguir creyendo en los hijos de la ratonera.
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